Sandro Scaramelli, co-fundador y CEO de Infobae, participó de la primera jornada de Cartagena Inspira con una conferencia titulada “Hacia dónde van los medios del Siglo XXI”.
Comenzó la charla repasando las grandes disrupciones que experimentaron los negocios y la vida cotidiana en los últimos 20 años. El profesional aseguró que el cambio de paradigma que se está produciendo es una tormenta perfecta que amenaza todas las industrias.
En la segunda mitad de su presentación, el ejecutivo repasó la historia de Infobae desde su lanzamiento en 2002. Scaramelli y Daniel Hadad compraron un diario en papel muy chico especializado en economía y lo transformaron en un medio 100% digital. “Pasó a ser una página que habla de todo, por cualquier medio de comunicación por el cual se pueda mandar información, incluyendo un chatbot, twitter, una aplicación”, contó.
Otro de los aspectos en los que evolucionó el medio fue concentrarse en hacer buen periodismo y dejar de lado el aspecto tecnológico. “Creíamos que tener un publicador o un servidor propio era una ventaja competitiva, pero hace unos años lo replanteamos y decidimos ir a los mejores, usar las mejores herramientas que el mundo tiene para ofrecer”, contó Scaramelli.
Una de esas herramientas son las redes sociales. “El periodismo en el mundo combate contra estas empresas –sostuvo–. Para nosotros son un portaaviones que nos va a llevar al puerto que queremos. Con ventajas y desventajas, pero es indudable que la audiencia está ahí”.
También apuntó que, además de dar buena información, Infobae lucha por capturar la escasa atención de los lectores. En ese sentido, hoy en día la competencia de un medio no es sólo contra sus pares sino contra toda actividad disponible para pasar el tiempo libre.
En cuanto a cómo desembarazarse de lo viejo y construir un verdadero medio del siglo XXI, Scaramelli sostuvo que: “Hay que tirarse a la pileta: no es momento de meter un dedo a ver si el agua está fría”.
Para finalizar, compartió algunos consejos respecto a lo que sí hay que hacer: salir a explorar y buscar soluciones innovadoras, usar todas las herramientas disponibles, y no esperar una “bala de plata” que resuelva todo. También instó a escuchar a la audiencia, asociarse a los número 1, y darle importancia a la métrica (“Es uno de los cambios culturales que más cuesta en la industria, pero no tengo que explicarles a ustedes la ventaja de medir”, acotó).