Negocios > Argentina | ENTREVISTA CON EL CEO DE LA COMPAÑÍA CERVECERA KUNSTMANN
Por Redacción Adlatina |
Con una inversión de 3 millones de dólares, hace un año la marca chilena de cerveza Kunstmann inauguró su primer microcervecería en la Argentina, en la ciudad de Bariloche. En diálogo con Adlatina, Armin Kunstmann, el fundador de la firma que hoy está controlada en partes iguales por su familia y por la multinacional CCU, asegura que su proyecto es el puntapié inicial en un proceso de renovación del negocio cervecero en la región, que incluye el desarrollo de nuevas propuestas y el crecimiento de las llamadas marcas artesanales.
-¿Qué balance hacen de este primer año de la microcervecería en Bariloche?
-Los resultados fueron muy positivos. El emprendimiento se consolidó como un lugar para degustar una gran variedad de cervezas, acompañado por una gastronomía de excelencia. Además estamos ofreciendo nuevas propuestas como los tours guiados para el turismo.
-¿A nivel mundial hay una tendencia hacia la sofisticación del negocio de las cervezas?
-Es un fenómeno que se está dando en cada vez más mercados, pero igualmente no siempre alcanza con ser un producto artesanal y las nuevas marcas también deben ofrecer una sofisticación del consumo.
-¿Cómo hacen para mantener el concepto de artesanalidad asociados a una multinacional?
-Hoy el grupo CCU es nuestro socio con el 50% de las acciones, pero mantenemos el otro 50%, lo que nos permite lograr una combinación muy ventajosa. CCU se encarga de la distribución y las ventas y nos permite acceder a menores costos, especialmente, en materia de logística. Pero la esencia y el ADN de la marca siguen en manos de la familia Kunstmann.
-Las grandes multinacionales están apostando cada vez más a este negocio…
-Seguro, porque se trata de un negocio en crecimiento. Pero la clave para cualquier incursión en este sector pasa por la autenticidad. Una marca artesanal tiene que ser real.
-¿Cuál es la mayor traba para el crecimiento de la categoría en la región?
-El consumidor es cada vez más sofisticado y busca propuestas alternativas a las que ofrecen las grandes marcas. Por eso, la principal barrera pasa por los canales comerciales y los problemas que enfrentan las marcas artesanales para estar en todos los puntos de venta.