Para José Mollá, fundador y director creativo de La Comunidad, y presidente del jurado de Gráfica en Diarios, Revistas y Exterior en El Sol. El Festival Iberoamericano de la Comunicación Publicitaria, la decisión de hacer de El Sol un festival más internacional es acertada. “Es bueno que El Sol se convierta en uno de los grandes referentes de lo que va a pasar luego en los premios internacionales. El Sol está en un proceso de transformación, respondiendo a la globalización de nuestra industria, y es interesante ser parte de esa evolución”, subraya.

En particular, Mollá destaca la oportunidad que esta apertura representa para la región, pues considera que el nuevo formato del certamen logrará sacar “las grandes ideas de Latinoamérica de la sombra”. En efecto, desde su punto de vista, “la creatividad latinoamericana sigue siendo muy fuerte, pero perdió un poco de fuerza en la percepción internacional”.

En cuanto a su participación como presidente de jurado, desea “que haya lugar para debatir el trabajo, porque es la parte más interesante de ser jurado en los festivales”, y que su intención es “establecer un criterio alto por el bien del festival, pero sin tratar de imponer sobre todo mi opinión personal”. Y agrega: “Más allá de que sean ideas que puedan tener repercusión internacional, los insights locales van a ser también tenidos en cuenta a la hora de juzgar”.

“Me gusta ver cómo los medios tradicionales se las ingenian para aprovechar las tecnologías emergentes y el poder del social media”, comenta con respecta a la categoría que le tocará evaluar.

A la hora de juzgar, aplicará un criterio que distinga “las grandes ideas con identidad propia que ayuden a que la gente se relaciones con marcas y productos”. Al respecto, Molla explica: “Tengo una inclinación natural por las grandes ideas que construyen marcas. Siempre que tengo un clicker de votación en la mano, recuerdo que nuestro trabajo no es solo entretener, sino también comunicar y vender”.

Molla sostiene que ganar en El Sol “es un gran reconocimiento”, y recuerda que La Comunidad fue la primera agencia no española en ganar el Gran Premio: “En su momento fue un shock para muchos españoles”.

También confiesa una especial debilidad por el festival: “Tiene una parte emotiva para mí en lo personal, ya que viví más de dos años en el país vasco”. Detalla, además, que su carrera como redactor comenzó con la oportunidad que se le dio en la agencia Dimensión “aun cuando mi carpeta no daba indicios de talento alguno”.