Andrea Corno fue designado como regional growth & client success Latam de Fidasense, y asumirá el liderazgo y la coordinación general de las operaciones de la empresa en toda la región.
Procedente de Banco Supervielle –donde se desempeñó por cuatro años como gerente de comunicaciones, branding y comunicación digital-, Corno también ocupó durante seis años el cargo de director ejecutivo de innovación y nuevos negocios para Latam de Future Brand. Desarrolló gran parte de su carrera profesional en Europa y Estados Unidos, donde se dedicó a crear las unidades digitales de algunas de las agencias de los grupos IPG y WPP; también trabajó en Venture Capital, cuyo core fue el desarrollo de startups digitales.
Su objetivo dentro de la compañía será acompañar los clientes en conectar sus marcas con todos los aspectos de la tecnología y llevar adelante la ejecución de la gestión en el día a día. “Entramos en profundidad en las organizaciones a través de design thinking para acompañar a las marcas, tanto en su capacidad de impactar como en su capacidad de fluir. En dos palabras, glow & flow”, aseguró.
Debido a su gran experiencia, el ejecutivo explicó que el espacio para organizaciones Brand Tech, que logren conectar marcas, datos y tecnología y puedan brindar un enfoque estratégico y fluidez en la ejecución, es enorme. “Hay que tener la paciencia de explicar a los clientes las ventajas de dar un salto de calidad en el entorno digital, con un partner que tiene la capacidad de profundizar en los aspectos más críticos y conectarlos con los drivers de negocio”, detalló.
-¿Qué expectativas tiene respecto a trabajar para la región latinoamericana?
-Tuve la suerte de trabajar en más de 25 países en el mundo, entre los cuales prácticamente trabajé en todos los latinoamericanos. Hay culturas y formas de interpretar la comunicación, pero hay también patrones comunes. A Latinoamérica hay que mirarla desde muchos puntos de vista diferentes, no sólo desde la observación macro de los países; hay enormes diferencias y similitudes entre áreas urbanas y rurales, entre norte y sur del continente, entre diferentes tipologías de ciudades. En algunos aspectos Quito es más cercana a La Paz que a Guayaquil; hay patrones comunes entre Medellín y Santa Cruz de la Sierra, por ejemplo. Los países chicos de Centroamérica tienen necesidades parecidas en un contexto político y social muy diferentes.
En eso me guían las grandes experiencias de las más de 20 nacionalidades que existen en la compañía, la presencia de expertise y culturas diferentes, el management local, la apertura de la organización en involucrar diferentes recursos, un diálogo abierto con los clientes de diferentes industrias que solemos juntar en nuestras oficinas para intercambiar visiones y cultura.
-¿Cuáles considera que serán los temas que marquen tendencia en la región?
-La necesidad constante de llevar adelante procesos de cambios culturales que aporten valor a los consumidores sin generar rupturas. Tenemos la suerte de tener claro lo que funcionó y fracasó en otras áreas del mundo que tienen históricamente niveles de avance tecnológico y de comunicación más altos. Hay que mirar hacia Europa, Asia, Estados Unidos y entender cuáles tendencias puedan ser funcionales a algunas industrias.
Con la enorme ventaja de poder saltar algunos pasos, esta es una región donde lo digital y principalmente mobile, y donde los primeros en cada industria en experimentar innovación, tienen capacidad de adueñarse de cuotas de mercado muy relevantes.
Estamos en un continente donde quien se mueve bien y rápido, puede realmente hacer la diferencia. Para eso estamos, para acompañar a empresas que tengan hambre de crecer y ganas de experimentar e innovar.
