El flujo de ingresos de Facebook es dependiente, en parte, del depósito masivo de data que cosecha de sus usuarios de todo el mundo.
Pero no es caso de WhatsApp, la sorprendente adquisición multimillonaria de Facebook. “Su data no está siquiera en la foto. Nosotros simplemente no estamos interesados en ella”, proclamó WhatsApp en un post de junio de 2012, en el que explicó por qué el servicio de mensajería no vende avisos.
La cuestión que se plantea en muchas mentes es si las mesas se volcarán, y en el caso afirmativo, cuándo.
La pieza principal que necesita WhatsApp para proveer su servicio es un número de teléfono móvil.
“WhatsApp es popular porque es privado”, dijo Justin Brookman, director del Center for Democracy and Technology's Project on Consumer Privacy. “Parte del valor en la confianza en el ecosistema está basado en la protección de la privacidad, de modo que Facebook debería utilizar a fondo esa buena voluntad si trata de cambiar esa situación”.
Por ahora, WhatsApp promete que el servicio permanecerá sin atisbos de publicidad. “Usted puede todavía contar con que no habrá ningún aviso que interrumpa su comunicación”, informó la firma en un post.
No obstante, los términos de servicio de WhatsApp en el ecosistema de Android requiere que los usuarios aprueben el acceso a muchos otros tipos de información, incluyendo locación geográfica, contactos conservados en el teléfono, data de perfil personal en la información de contacto, y la ID. A los usuarios de iOS de Apple se les pide que aprueben la colección de contactos y permitan notificaciones, como las alertas.
Data compartida
La política de privacidad de la firma, a diferencia de la mayoría de sus similares, está escrita más en términos legos que en vocabulario legal, y está muy claro qué cosas colecta WhatsApp y cuáles no, y cómo debería ser usada esa información. La política de privacidad dice que la app no reúne nombres, direcciones, emails y data de locación, y que la única información de contacto obtenida de los usuarios del mobile son los números de contacto. La contradicción entre esta política de la compañía y los requerimientos del mobile parece ser el resultado de un lenguaje estándar asociado con los downloads de Android e iOs de Apple.
El servicio también purga el contenido de los mensajes. “Los contenidos de mensajes que han sido entregados por el servicio WhatsApp no son copiados, conservados o archivados por WhatsApp en el curso normal de los negocios”, dice la declaración de la política de privacidad. Así, teóricamente, a diferencia del Gmail de Google o de los avisos en el sitio de Facebook, las keywords de los mensajes que la gente envía utilizando el WhatsApp no serán utilizados para informar al targeting de avisos.
Aunque la publicidad es un anatema para los principios fundadores de WhatsApp, eso no le impide necesariamente a la firma alterar sus principios de privacidad o colección de data para facilitar el compartir la data de usuarios con Facebook. Por un lado, Facebook puede estar interesada en determinados grados de proximidad con la gente. Muchos han cedidos sus números telefónicos a Facebook, y la firma podría conectar esa información con la data de WhatsApp, para saber más acerca de qué usuarios interactúan más a menudo con otros, basados en cuán frecuentemente están en contacto en WhatsApp.
Mercados emergentes
En el corto plazo, Facebook está lista para recabar más información sobre mercados emergentes por la vía de esta adquisición. El servicio de mobile Jana realiza encuestas entre sus usuarios en intercambio con la data de la utilización de los aparatos. La firma descubrió así que WhatsApp es popular en los mercados emergentes. En Brasil, el 63% de los participantes de las encuestas dijeron que WhatsApp es su servicio de mensajería más utilizado, comparado con el 5,58% que mencionó a Facebook como su aplicación para mensajes. En la India, WhatsApp fue la favorita del 55% en comparación con el 0,85% de Facebook. En México, el 76% dijo preferir a WhatsApp contra sólo un 5% de Facebook.
Con la adquisición, Facebook apunta a un mejor vínculo con usuarios de los mercados emergentes, sugirió Nathan Eagle, co-fundador y CEO de Jana. “La data en general no es realmente el foco de WhatsApp”, dijo, y agregó que perfeccionar un servicio de mensajes rápido, eficiente y no costoso “es el foco principal”.
Si Facebook tiene éxito en mantener y construir un vínculo más fuerte con WhatsApp, eso podría conducir a los usuarios de Facebook hacia donde verán avisos, potencialmente haciendo el targeting con la data enriquecida por el uso del WhatsApp.
