Con un evento en Polka, Pepsico presentó los nuevos comerciales de la campaña El sabor de ganar.

La apertura del encuentro estuvo a cargo de Esteban Agost Carreño, communications manager de Pepsico Alimentos de Cono Sur, quien presentó a los invitados: Adrián Suar, el actor y productor, y Pablo García, gerente de marketing de Pepsico.

Primero fue el turno de García, quien comentó: “En esta oportunidad, Lay´s convoca a todos los argentinos para que sean protagonistas e inventen el próximo gran sabor de papas fritas. Los tres sabores finalistas serán lanzados a la venta y sus creadores podrán ser protagonistas de la campaña de comunicación, y el que más venda puede ganar 100.000 pesos".

De acuerdo con el ejecutivo, las repercusiones de la campaña fueron muy buenas, ya que en menos de una semana recibieron 11.000 sabores enviados por el público. “Esta es una de las campañas más grandes de la compañía. Lo más interesante es que estamos involucrando a los consumidores, ellos son los verdaderos protagonistas. Somos muy optimistas”, agregó García.

Luego, Suar, la figura de los spots, tomó la palabra y señaló: “Cuando me mostraron la campaña la idea me gustó. Sentí que le iba a poder poner el cuerpo y que no me iba a desnaturalizar con respecto a mi personalidad”.

La campaña El Sabor de ganar durará 6 meses y fue producida por las agencia Promored. Incluye comerciales de TV, radio, gráfica y online, producidos por PolKa bajo el mando del director de cine Marcos Carnevale.

El caso ya se realizó exitosamente en otras partes del mundo con el nombre Do us a flavor y contó con figuras como Eva Longoria y Gary Lineker.

“Me siento contento con lo que está saliendo al aire”, dijo Suar. Y agregó: “Me siento parte de la familia Pepsico”.

Para finalizar la velada, se presentaron los nuevos comerciales, que saldrán al aire a partir de hoy, y un divertido backstage en el que mostraron los entretelones de la producción de los comerciales, donde el fundador de PolKa expresa su amor por las Lay’s y pide a los consumidores su colaboración para darle algo nuevo a la relación, es decir, un nuevo sabor.