Paul Chibe, el vicepresidente de marketing para Estados Unidos de la empresa cervecera, cargo que ocupa desde junio de 2011, se está haciendo a un lado y será reemplazado por Jorn Socquet, el vicepresidente de marketing de Canadá, desde 2010.
“Paul [Chibe] va a continuar en las próximas semanas para asegurar una transición fluida con Jorn [Socquet] en iniciativas de marketing importantes, como el Super Bowl”, anunció A-B InBev en un memo enviado a mayoristas y empleados. Allí se indicaba que la decisión de irse era de Chibe.
El ejecutivo ha estado bajo presión para impulsar el desempeño de Bud Light, según ejecutivos de la industria. La compañía está desarrollando una campaña para la cerveza que se espera que debute durante el Super Bowl. La marca, que es la cerveza más vendida en Estados Unidos, se fue rezagando, como muchas de las cervezas de la categoría light en Estados Unidos. Las ventas cayeron un 0,68 por ciento en las 52 semanas previas al 3 de noviembre, según el IRI (Information Resources, Inc.), que no incluye ventas en bares y restaurantes.
En una entrevista, Chibe, de 46 años, dijo que quería invertir más tiempo con su esposa y sus dos hijos, citando los rigores de viaje de su trabajo. Dijo que está considerando mudarse de vuelta a Chicago, donde vivía antes de tomar el trabajo en A-B InBev, o a California. Dijo que la cervecera está rodando los anuncios del Super Bowl. “Voy a llevar a cabo lo del Super Bowl y una vez que eso esté hecho, es como una pausa natural para la transición”, dijo. “Puedo decirles que en un 1.000 por ciento me siento muy bien con lo que estamos introduciendo en el Super Bowl. Estoy muy contento sobre dónde vamos a estar”.
Chibe, quien se unió a A-B InBev después de estar 11 años en Wm. Wrigley Jr., supervisó muchos cambios de agencia para Bud Light. Rompió los lazos con DDB en 2011, finalizando una relación de tres décadas. Bud Light estuvo con McGarryBowen por un rápido paso, luego se mudó a Translation antes de poner la cuenta en manos de BBDO en junio, donde fue asignada a la oficina de Chicago, conocida como Energy BBDO.
El cambio reunió a Chibe con una agencia con la que ha trabajado estando en Wrigley y fue visto por muchos en la industria como su última oportunidad para devolver a Bud Light la potencia publicitaria que tuvo durante gran parte de su historia. En una reunión con distribuidores en noviembre, Chibe se jactaba de que la cervecera había crackeado el código de Bud Light, aunque no mostró ningún trabajo, según un informe de ese entonces de Beer Marketer’s Insight.
Durante su permanencia, Chibe buscó infundir un marketing de temática musical a las marcas de A-B InBev para atraer a los millennials. Frecuentemente, su socio era Steve Stoute, cuya agencia Translation ayudó a conseguir acuerdos de patrocinio vinculando a Jay Z con Budweiser y Justin Timberlake con Bud Light Platinum. El acuerdo entre Timberlake y Platinum tuvo un sólido comienzo en 2013 siendo que Platinum hizo ganancias consistentes. Pero está establecido que el pacto expire próximamente, dado que las ventas de Platinum quedaron rezagadas, según informó Ad Age más temprano.
La mayor parte de la atención en A-B se centra en revivir la marca principal de Bud Light, y probablemente esa sea la mayor responsabilidad de Socquet de cara al futuro. En el memo, A-B InBev atribuyó a Socquet que Budweiser se haya vuelto la cerveza número uno de Canadá, mientras se acelera el crecimiento de Bud Light para convertirse en la tercer marca más grande de Canadá. Antes de su rol en Canadá, Socquet era director global de Stella Artois, Beck’s y Hoegaarden.
El memo atribuyó a Chibe “varias contribuciones” incluyendo “trabajar con los equipos para establecer nuevos rumbos en el marketing de los social media; crear la serie de conciertos a gran escala Budweiser Made in América con Jay Z; y lanzar las altamente exitosas marcas Bud Light Platinum y Rita, entre sus muchos logros”.
