“Este León me pone muy contento, es lo más groso que hice en mi carrera”, asegura Pablo Poncini –socio y ceo de TBWA Argentina-. “Si yo hubiera podido elegir con qué trabajo ganar un León de oro en Cannes hubiera dicho este. La felicidad es doble”, agregó, con respecto al cortometraje autobiográfico “Las 1000 millas de Luca”.

En este sentido, el segundo aspecto importante que destaca Poncini, es que el equipo detrás de este trabajo es su propia familia. “Antes de estar orgulloso por el corto, estoy orgulloso por lo que hicimos como familia. Normalmente uno le dedica los premios a su familia, en este caso el premio es de ellos”.

La iniciativa surgió de parte del Consejo Publicitario Argentino, que buscaba realizar una campaña que conmemorara el día internacional de la discapacidad, el 3 de diciembre.

“Hace años, cuando vinieron del CPA y me dijeron cuales eran los temas anuales, yo les dije que si en algún momento hacían algo relacionado con discapacidad me tuvieran en cuenta. Así que cuando vinieron con la idea, la tomé. No sabía qué hacer. Fue un proceso de a poco. El tema era la inclusión. Nosotros como familia hemos dado un muy buen mensaje -en el uno a uno- a mucha gente. A nosotros nos pasó eso con otra familia cuando nació Luca. Entonces, lo primero que dije fue ‘voy a contarlo en primera persona’. Porque si este es un buen mensaje, por qué no aprovechar mis herramientas como comunicador para contarlo a nivel masivo”, explicó.

Fanático del cine, Poncini pensó que la mejor forma sería contarlo a través de un road movie, un viaje, que es un lindo fragmento de la vida. “Tiene que ver también con que yo una vez por año hago un viaje con Luca, de varones solos, y la idea era contar cómo fue difícil al inicio y cómo es el día de hoy. El siguiente paso fue hablar con Martin Kalina, era clave encontrar un director con quien nos sintiéramos cómodos frente a la cámara. Porque era algo muy nuevo para los dos”.

El corto habla de su propia historia como padre de un chico con síndrome de down, sintetizada en un cortometraje que muestra la entrañable relación con su hijo Luca y el afecto que puede haber entre dos personas más allá de cualquier tipo de discapacidad.

Con respecto al León que obtuvo la campaña, Poncini comentó que al principio, las sugerencias de inscribirla llegaron de manera tímida.

“En un momento alguien me preguntó, medio con vergüenza, si lo inscribiría. Por supuesto, porque es coherente con lo que estoy diciendo. Yo trato todo con naturalidad. Si quedó buenísimo, por qué no lo voy a inscribir; además, para mí es una posibilidad de seguir mostrándolo”, agregó.

Para concluir, aseguró que ganar un oro en Cannes, en Film, es el premio más importante que puede existir en el mundo. “La felicidad es triple. Es familiar, es una satisfacción personal y es una excelente noticia para TBWA”.